miércoles, 26 de octubre de 2011

CON OTRAS IDEAS Y PENSAMIENTOS


ComOnu

La alta comisionada adjunta de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Kyung-wha Kang, considera poco realista implantar en Chile una educación universitaria gratuita "de la noche a la mañana", pero abogó por instalarla "de forma progresiva". Así lo señala en una entrevista realizada y difundida hoy por la Oficina Regional para América del Sur del Alto Comisionado para los Derechos Humanos, con sede en Santiago de Chile, donde la representante de Naciones Unidas estuvo de visita la semana pasada. En esta entrevista, como ya lo hizo al finalizar su visita, Kyung-wha Kang insiste en que durante el conflicto estudiantil en Chile, que lleva cinco meses activo, "ha habido violencia por ambas partes" (jóvenes y policías) y que ésta "no debe ser tolerada". En ese sentido, advierte que el Gobierno ha cometido "excesos" en su respuesta a estas manifestaciones y lo insta a actuar de manera "proporcional y de acuerdo con las directrices internacionales sobre el control de multitudes, el uso de la fuerza y las armas". Como ejemplo de esos excesos, la alta comisionada se pregunta por qué el policía que percutió el tiro que mató a un joven durante el paro sindical de fines de agosto portaba una subametralladora, si se encontraba "en el contexto de control público". Sobre las demandas de los estudiantes, que exigen educación pública, gratuita y de calidad y poner fin al sistema impuesto durante la dictadura, Kyung-wha Kang coincide en que "la educación es un derecho, no es caridad". Opina que la educación primaria "debe ser gratuita para todos", la secundaria "también, progresivamente" y, a su juicio, lo mismo debería ocurrir a nivel universitario, aunque solo para aquellos que demuestren la capacidad de cursar esos estudios. Aun así, señala que implantar la gratuidad a nivel universitario "de la noche a la mañana no es realista". "Pero eso no debería ser un impedimento para hacer un compromiso a largo plazo para lograr ese objetivo", advierte. El Gobierno del presidente chileno, Sebastián Piñera, que en una ocasión definió la educación como un "bien de consumo", se ha mostrado dispuesto a garantizar la gratuidad, a través de becas y créditos de bajo interés, a universitarios de clase media y baja, pero no de forma universal. Esto derivó hace tres semanas en el quiebre del diálogo con los estudiantes, que exigen que la gratuidad beneficie a todos y que este cambio se financie a través de una reforma tributaria.

A.I . 21/10/ 2011