Por
cadena nacional de televisión, cuatro militantes del MIR que se encuentran
detenidos por la DINA, reconocen la derrota política y militar del movimiento e
instan a sus compañeros a deponer la lucha armada contra la dictadura. Los detenidos
aseguran además, no haber sido torturados. Dos de ellos, Humberto Menanteaux y Hernán
Carrasco, serán liberados y vueltos a detener en noviembre. El 25 de diciembre
sus cuerpos aparecerán destrozados y mutilados en la cuesta de Chada. Los otros
dos, Héctor Hernán González y Cristian Mallol, recuperaran su libertad y partirán
al exilio.