CUREPTO.- El director del Servicio de Salud del Maule, Gerardo Herrera Latorre (PPD), un veterano de la crisis del Hospital Regional de Talca y su escándalo de las guaguas cambiadas, fue destituido ayer por La Moneda debido a su rol en la bochornosa inauguración del Hospital de Curepto.Éste fue entregado por la propia Presidenta Michelle Bachelet el pasado 29 de febrero pese a que sus camas y pacientes eran en realidad un montaje debido a que el centro asistencial aún no tenía los equipos necesarios para atender a la comunidad.Tras la denuncia hecha por el alcalde de Curepto, el vocero de Gobierno Francisco Vidal anunció que el funcionario fue desafectado: "A la Presidenta de la República no se le miente, al pueblo de Curepto, que son 10 mil habitantes, tampoco, y esa inauguración de hospital no corresponde".Herrera replicó que "todos estaban informados de las condiciones en que estábamos inaugurando el hospital". El destituido funcionario -era seremi de Salud del Maule cuando esa cartera decidió intervenir el Hospital de Talca- negó ser autor de un "montaje" y aseguró que detalló con antelación el estado del equipamiento a la avanzada presidencial y al intendente del Maule, Alexis Sepúlveda (PRSD), quien ayer dijo no estar al tanto del tema.El ministro Vidal reconoció implícitamente una falla de la avanzada presidencial. "Estamos viendo el tema, en su minuto se les comunicará", advirtió.El Hospital de Curepto, con 64 funcionarios entre médicos y administrativos, tenía ayer sus 12 camas vacantes. Sólo atienden el Policlínico y el Servicio de Urgencia.Herrera, enfermero de profesión, aseguró que acatará la decisión del Gobierno, aunque acusó que "se han distorsionado las cosas". Responsabilizó al alcalde Armando González (RN), por "engañar" a la población al afirmar que el hospital fue inaugurado con camas prestadas.Pero el alcalde retrucó: "No he mentido (...) Efectivamente, las camas que llegaron para la inauguración se retiraron de inmediato".A Herrera también se le acusa de haber presentado a un funcionario del hospital como falso paciente ante la Presidenta. El directivo destituido explicó que el supuesto hospitalizado -César Opazo (48)- es encargado de personal y se recuperaba de una infección en una pierna: "Estaba hospitalizado en su casa y fue llevado al hospital, pero estaba enfermo".La existencia de la dolencia fue confirmada por Opazo, quien negó ser parte de un montaje: "Estaba con hospitalización domiciliaria. Me internaron todo el día, desde las 8 de la mañana hasta las 5 de la tarde. Pero estaba enfermo y con licencia".Ese 29 de febrero la Presidenta Bachelet también conversó con una mujer embarazada que fue a un control en el policlínico.El director del hospital, Gonzalo Rojas, dijo haber criticado desde un comienzo la apresurada inauguración y la internación de Opazo. "Nuestra negativa a hospitalizar un funcionario se le hizo ver al director del servicio. La idea de la hospitalización no partió de nosotros; fue una solicitud de rangos superiores".La ministra de Salud, Soledad Barría, afirmó no haber ordenado la apertura del centro asistencial porque en febrero "estaba de vacaciones".Funcionarios del hospital aseguraron que habrían recibido presiones de la Intendencia para que hubiera, al menos, un paciente hospitalizado. Y el jefe de maternidad, Mario Gómez, también advirtió a la avanzada presidencial y a la Intendencia sobre la nula capacidad de hospitalización