TRATO DESCRIMINATORIO A DIRIGENTE DE LOS DD.HH.

El hospital Naval se mostró sorprendido por la declaración pública que realizó el presidente de la Agrupación de Derechos Humanos Salvador Allende, Manuel Aguilante, quien acusó a dicho recinto de haberlo sometido a un trato discriminatorio al obligarlo a sacarse el cartel que suele portar con la fotografía de un detenido desaparecido. Aguilante concurrió en la víspera a dicho hospital para ser atendido en virtud de que es beneficiario del Programa de Reparación Integral de Salud y Derechos Humanos (Prais). El jefe de Relaciones Públicas de la III Zona Naval, capitán de fragata Mauricio Velásquez, respondió las acusaciones de Aguilante y aseguró que nunca hubo discriminación, por lo mismo, negó que se le pidiera quitarse el cartel. La versión que dio el Hospital Naval dista mucho de la que entregó el dirigente de Derechos Humanos. Según Aguilante, él concurrió al recinto médico para realizarse una audiometría. Indicó que la funcionaria que lo atendió, y que identificó como Mabel Calvo, le habría exigido que se sacara el cartel del detenido desaparecido, Francisco Betancourt, que portaba, o no le haría el examen. Aguilante declaró que esta actitud no será aceptada por ningún dirigente de organizaciones de Derechos Humanos y llamó a las autoridades del Hospital Naval a emitir una declaración pública, asegurando que las prácticas de la dictadura han terminado. Velázquez, en cambio, sostuvo que Aguilante llegó por recomendación de su médico tratante a realizarse el examen con la tecnóloga médica, que trabaja en distintos recintos, además del Hospital Naval. Explicó que la funcionaria le pidió que siguiera el conducto regular, debido a que no pidió hora. El capitán de fragata lamentó la actitud de Aguilante y enfatizó que la exigencia, de seguir el conducto regular que se le hizo al dirigente de DD.HH., habría sido la misma si se tratara de un marino.
Diario Austral Febrero 2009
Comisión Salud Prais
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