Adriana
Rivas no tiene un ápice de arrepentimiento de lo que hizo, por el contrario,
ella asume que la tortura “era necesaria” para que los detenidos hablaran,
tiene un perfil psicopático parecido al de Osvaldo Romo. Lo concreto es que
éstas declaraciones, es que permitieron ubicar su paradero y que se solicitara
su extradición, cuestión que hoy se está transformando en una realidad.
De este
horror sin límites y un personaje siniestro, nada puede salir algo bueno. Pese
a todo, esperamos responda por algunos crímenes de Calle Conferencia y
de las víctimas que vivieron el horror en ese lugar, al menos ya se hizo más
concreta su extradición ahora sólo queda esperar.
“Mis mejores años de vida, de juventud, fueron los que viví en la DINA“. “La tortura existió desde que yo tengo uso de razón en Chile,
siempre existió. Todo el mundo sabía que tenían que hacer eso y
quebrar a la gente de alguna manera, porque los comunistas son cerrados. La tortura era necesaria,
la misma que usaron los nazis, era absolutamente necesaria. ¿Tú crees que en Estados Unidos no hacen lo mismo? Todo
el mundo lo hace, porque es la única manera de quebrar a la gente, porque
psicológicamente no está la inyección que te ponen en las películas para que tú
digas la verdad, no existe. Nadie te va a decir y se va a sentar: - ¿Dígame
qué hizo usted hoy día? Nadie te va lo va a decir así tan campante -yo
maté a fulano o sultano. Tenian que ocupar la tortura para saber dónde estaban
los terroristas“.
La mujer,
quien fue secretaria de Manuel Contreras, aseguró, en todo caso, que nunca
presenció estos apremios porque no soporta el sufrimiento humano.
Al ser
preguntada por el paradero de los más de 3.500 detenidos desaparecidos,
contestó que es algo que nunca se sabrá: “Si está muerto, está muerto.
¿Dónde están? No se sabe”, dijo la ex agente, que acusó a los jueces de “beneficiarse
de los procesos judiciales vinculados a las violaciones de derechos humanos“.
Rivas contó
que se casó en 1978 y viajó con su marido a Australia, donde se
estableció. En 2006 regresó a Chile para asistir al matrimonio de una
sobrina y poco después fue detenida por su implicación en el caso ”calle
Conferencia”, operación de asesinato de los miembros de la dirección
clandestina del Partido Comunista en 1976, entre los que murió y
desapareció el secretario del Partido Comunista, Victor Díaz.
Tras pasar
detenida unos meses le concedieron la libertad condicional con la prohibición
de salir del país. Fue una temporada difícil en la que vivía de la pensión de
su madre y de la ayuda que le enviaba su familia porque no podía trabajar.
Los inicios de La Chani
Adriana
Rivas aún no se titulaba de secretaria bilingüe cuando fue reclutada por la
Dina en el Instituto en el que estudiaba. Al igual que las otras mujeres
tuvo que pasar por el adiestramiento militar en las Rocas de Santo Domingo. En
1976 pasó a formar la Brigada Lautaro, cuando estaba ubicada en el edificio
número cinco de Las torres de San Borja. De ella, Jorgelino Vergara, el
famoso asistente de la Dina, tiene uno de sus peores recuerdos. En una ocasión
la vio en el gimnasio golpeando a uno de los detenidos que estaba sentado en
una silla con las manos esposadas en la espalda. Todos los golpeaban con un
“polin”, incluidas las mujeres, también vio a Rivas. Aún agitados y con sus
rostros feroces, el grupo sólo se detuvo cuando le fracturaron uno de los
brazos al interrogado. Tiempo después se supo que la víctima se trataría de
Daniel Palma, un conocido militante del Partido Comunista. “Los vi a todos
participar en esa escena, hombres y mujeres a todos, eso a mí ya no me llamaba
la atención”, explicó Vergara en contacto con El Dínamo.
Rivas,
públicamente, niega haber participado de alguna tortura, pero el abogado
Eduardo Contreras -querellante en el caso- afirma lo contrario. “La
torturadora Adriana Rivas, ex secretaria personal de Manuel Contreras, prófuga
de la justicia chilena y radicada en Australia, es una de las criminales más
peligrosas y agresivas de la dictadura. Participó personalmente en el asesinato
de nuestro inolvidable dirigente Víctor Díaz y en el de muchos otros compañeros
antifascistas de diversos partidos”, comentó.
Fuente: SBS.Com